jueves, 30 de marzo de 2017

El juicio a Cassandra Vera, ¿despropósito o transfobia?



¿Quién humilló a quién? Esa es la pregunta que me surge tras ver algunas imágenes del juicio a Cassandra Vera y leer la sentencia que la condena a un año de prisión, siete de inhabilitación y a pagar las costas del juicio por considerarla culpable de un delito de humillación a las víctimas del terrorismo por 13 tuits publicados entre noviembre de 2013 y enero de 2016. Aunque para ser exactos deberíamos decir que le han considerado culpable a él, no a ella. Por cierto, mucha gente no sabía que Cassandra es una mujer trans hasta que en la vista del juicio se ha escuchado a D. Pedro Martínez Torrijos (el Fiscal) y a los tres magistrados dirigirse a ella como si fuera un varón y no como mujer.

Al margen de que se supiera o no que Cassandra es una chica transgénero, lo relevante es que ella no se identifica como varón y ni se nombra como tal ni desea ser reconocida con una identidad masculina. Partiendo de esto, la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional debería haberla tratado como mujer durante la vista oral máxime cuando el eje central de la discusión era la humillación, el menosprecio, el descrédito, la perdida de estima, los amores propios heridos, la actitud irrespetuosa y… la dignidad de las personas. 

jueves, 2 de marzo de 2017

¿Por qué debe actuar el Fiscal de Menores ante los folletos de Hazte Oír?


El odio es un sentimiento. El odio no es un delito como tampoco lo es el amor. Es el uso del Lenguaje del Odio el que es un delito según el 510 de nuestro Código Penal. Es el Lenguaje del Odio el que hace que sea necesario ese tipo penal para castigar a aquellos que inciten el Odio hacia los colectivos especialmente vulnerables que son sistemáticamente perseguidos por las mentes totalitarias que no aceptan más ideología que la suya y padecen: intolerancia extrema. Aleccionan para ello con discursos y mensajes que confunden y falsean, dividen y fragmentan, rompen la paz social y niegan el diálogo y la diversidad.